Si viajas mucho, se acumulan demasiadas impresiones en tu cabeza. Necesita ordenarlos de alguna manera y ordenarlos en los estantes. Después de todo, no importa cuántas fotos tomes, cuántos recuerdos traigas, las impresiones son lo más importante, se quedan contigo para siempre y te inspiran en futuros viajes.
Instrucciones
Paso 1
Hay aplicaciones especiales en Internet que le permiten marcar en el mapa qué países ya ha visitado. El esquema es simple: inicia la aplicación, enumera (o marca en la lista) los nombres de los países, y luego ve un mapa en su blog o en una página en una red social, en la que se enumeran los países que visitó en color (o de alguna manera diferente). Estas aplicaciones son convenientes porque cuelgan de Internet y no irán a ninguna parte, no se perderán, y no solo usted, sino también sus amigos podrán apreciar sus logros como viajero. Además, estos gadgets son gratuitos y visuales, lo que significa que son llamativos y atraen a la gente a su página.
Paso 2
Si no le gusta Internet y prefiere la comunicación real a la comunicación virtual, compre un mapa grande del mundo, cuélguelo en la pared y marque los países con chinchetas. Compra botones de diferentes colores para hacerlo más divertido, interesante y visual. Cuelgue el mapa en un lugar destacado donde los invitados puedan verlo; no solo está marcando todos estos países para su propio placer.
Paso 3
No conduzcas tu imaginación a algún tipo de marco, porque puedes marcar los países visitados de tal manera que toda la idea se convierta finalmente en casi una obra de arte. Haz un collage de los souvenirs más típicos de tus países, cuelga fotografías de personas pertenecientes a una nación en particular en la casa. Hay muchas formas, no puede limitarse a imanes en el refrigerador.
Paso 4
También puede marcar en qué países ha visitado en creatividad. Si eres periodista o simplemente escribes bien, escribe un artículo sobre cada país. Si eres fotógrafo, trae fotos.
Paso 5
Entonces, todo depende de tus objetivos: si viajas y creas exclusivamente para ti mismo, entonces esconde tus obras maestras en un cajón y vuelve a leer o navegar en secreto a tu gusto. Si no está en contra de la publicación, entonces la bandera está en sus manos y mucha gente conocerá los países que ha visitado. ¡Pero asegúrese de que el público no tenga una opinión equivocada sobre este o aquel estado!